LA LUCHA EN EL PLANO CULTURAL

Es ya una necesidad hacer que se vuelque la atención sobre la importancia de la lucha en el plano cultural.

Y hacer entender que esto no es una tarea exclusiva del revolucionario que anda con una guitarra al hombro, declamando un poema e interpretando algún texto literario.

Ante el crecimiento cuantitativo de las organizaciones populares interesadas en la construcción de una nueva sociedad, organizaciones que no tienen a mano los materiales teóricos que su intención demanda, entonces es un deber subrayar aquellas creaciones que le expliquen por que la libertad económica- política llega aparejada con la creación de un estilo de vida, de una cultura mas plena de humanismo.

Pues valoramos las creaciones culturales y artísticas en función de la utilidad para el pueblo, en función de lo que aporten al ser humano, en función de lo que aporten a la reinvindicación del ser humano, a la liberación del ser humano, a la felicidad del ser humano.

Nuestra valoración es política, no puede haber valor estético contra el ser humano,no puede haber valor estético contra la justicia , contra el bienestar , contra la liberación ,contra la felicidad del ser humano, no puede haberlo. La cultura conserva y sintetiza la experiencia colectiva que un pueblo acumula a lo largo de las vicisitudes de su historia: es en este sentido, recuerdo colectivo que se trasmite a las nuevas generaciones como herencia social ( no biológica) y capacita, mediante su adquisición, a los individuos para integrarse como miembros normales de la comunidad, impregnándoles sus normas de comportamiento, valores, conocimientos y habilidades, etc. Cada sociedad hereda y restructura la herencia cultural acumulada por su historia pasada, selecciona, jerarquiza, consagra sus elementos de acuerdo a las necesidades y aspiraciones de su presente practica social - determinadas por las relaciones de producción establecidas - y de este modo, su cultura es la síntesis de los valores materiales y espirituales que ha alcanzado, como conjunto de formas y resultados de la actividad humana difundidos y consolidados en el seno de la colectividad a través de la tradición, de los medios de instrucción y educación, de la imitación, de la realización de modelos comunes extendidos tanto a terrenos de la producción material y la organización de la vida social.

Bien, en la medida que la cultura expresa la experiencia histórica particular de un pueblo y representa sus resultantes en su fisonomía social particular, su personalidad colectiva, la cultura ya no nos parece como entidad abstracta y genérica, sino concreta con sus determinaciones y cualidades sociales, regionales y temporales, como cultura nacional, esto es como marco organizador de la auto conciencia nacional.