LAS CREACIONES HUMORISTICAS

Todas las creaciones humorísticas están compuestas de ideas y por consiguiente conllevan la difusión de una determinada carga ideológica y de unos determinados valores que benefician a una clase social y perjudica a otra.

El humor, la sátira y el reír son tan viejos como la humanidad misma, es algo sublime y elevado porque es la ultima reacción del yo que se niega a dejarse imponer el sufrimiento.

A sabiendas, de que el humor es algo serio y que lleva consigo una carga ideológica es importante a la hora de la creación o producción del mismo, así como su asimilación, debemos tener presente que los seres humano serán víctimas del engaño mientras no aprendan a discernir detrás de todas las frases, declaraciones y promesas, morales, religiosas, políticas y sociales los intereses de una u otra clase. Porque en el humor no solo se produce el resultado exterior que conocemos como la risa, sino que además se produce la llegada de un mensaje que penetra casi imperceptiblemente en la conciencia de todos nosotros, que tarde o temprano se manifiesta en reacción.

La seriedad del humor llega hasta el grado de que se puede y debe trabajar conforme a reglas tales como condiciones:

1) Debe ser popular, sin caer en lo chabacano.

2) Culto, sin caer en la erudición y

3) Crítico, sin injusticia y respetando las leyes.

El humor elitista, que domina el genero del humor picaresco, es fomentado de manera sistemática por las clases y/o sectores dominates.

Y el humor popular, que tiene su principal campo de trabajo en el espacio del género satírico que es creado por los hombres y mujeres del pueblo y los artistas que a él le sirven. Y que son los mayores creadores de la cultura nacional - popular.

Con el humor picaresco las clases dominantes buscan o tratan de demostrar que las gentes del pueblo son ignorantes, que son inferiores, vagos y disaparatosos, al tiempo que tratan de hacer pasar el engaño como algo simpático y legitimo.

De ahi la invención de cuentos donde los personajes son humildes, carentes de inteligencia, como es el caso de Pedro Animal, Pepito y Juan Bobo.

Empero el pueblo responde con un humor popular y liberador. De ahi el surgimiento de muñequitos tipo Mafalda y Rius.

De todo ello se colige que no hay humor imparcial